Significado orientado a las personas
Cada líder de personas tiende a inclinarse por un estilo de liderazgo concreto más que por otro. Algunos se centran en el bienestar de sus empleados y en crear una cultura de equipo positiva. Para otros, su objetivo principal es completar las tareas y alcanzar los objetivos a tiempo, dentro del presupuesto y según lo prometido.
Tenga en cuenta que no hay un estilo de liderazgo mejor que otro. Cada uno tiene sus pros y sus contras y requiere un cierto nivel de juicio para desplegar el tipo adecuado de gestión en las circunstancias adecuadas.
El primer paso para adaptar tu estilo de liderazgo a las circunstancias es identificar hacia cuál te inclinas de forma natural. Para ayudarle a hacerlo, he aquí un resumen del estilo de liderazgo orientado a la tarea frente al estilo de liderazgo orientado a las personas.
Un líder orientado a las tareas es alguien cuya máxima prioridad es realizar las tareas para alcanzar las metas u objetivos definidos en el plazo especificado. Se centra en los resultados, el rendimiento y la productividad de las personas, el equipo o el departamento que dirige.
¿Cuál es la característica del líder orientado a las personas?
Los líderes orientados a las personas suelen centrarse en transmitir mensajes honestos y directos a sus empleados, permitiendo un diálogo abierto sobre preocupaciones, preguntas e ideas. Esta forma de comunicación permite valorar las opiniones de todos los empleados y democratiza el proceso de toma de decisiones en las organizaciones.
¿Qué es un liderazgo orientado a las personas?
Un líder orientado a las personas se centra en construir relaciones y hacer que sus empleados se sientan valorados, incluidos y motivados en el trabajo. La siguiente cita de Richard Branson resume muy bien este estilo de liderazgo: “Cuida de tus empleados y ellos cuidarán de tu negocio”.
¿Por qué es bueno el liderazgo orientado a las personas?
¿Cuáles son las ventajas del liderazgo orientado a las personas? Los líderes orientados a las personas se centran más en el bienestar, el desarrollo y la participación del equipo. La toma de decisiones es mucho más democrática y la voz de todos se considera igual, independientemente de su función o de su antigüedad en la empresa.
Orientación a las relaciones
¿Cuál es la diferencia entre el estilo de liderazgo orientado a las tareas y el orientado a las personas? ¿Cuál es mejor para su empresa? ¿Cuáles son los pros y los contras de cada uno? En esta entrada del blog, exploraremos las diferencias entre estos dos estilos de liderazgo y le ayudaremos a decidir cuál es el mejor para usted y su empresa. Esté atento.
El liderazgo orientado a las tareas es un estilo en el que el líder se centra más en las tareas que deben completarse para alcanzar el objetivo. Este tipo de líder suele ser más organizado y se le da mejor desarrollar estrategias y planes.
El liderazgo orientado a las personas es un estilo en el que el líder se centra más en las personas a las que dirige y en sus necesidades. Este tipo de líder suele preocuparse más por desarrollar relaciones y proporcionar apoyo.
Las diferencias clave entre los estilos de liderazgo orientado a las tareas y orientado a las personas son que los líderes orientados a las tareas se centran más en la tarea que tienen entre manos y en conseguir resultados, mientras que los líderes orientados a las personas se centran más en los miembros de su equipo y en asegurarse de que se sienten motivados y apoyados. Los líderes orientados a las tareas pueden parecer más severos y exigentes, mientras que los orientados a las personas pueden ser vistos como más compasivos y cercanos. En definitiva, ambos estilos de liderazgo pueden ser eficaces en situaciones diferentes.
Responsable
Cada líder de personas tiende a inclinarse por un estilo de liderazgo en particular más que por otro. Algunos se centran en el bienestar de sus empleados y en crear una cultura de equipo positiva. Para otros, su objetivo principal es completar las tareas y alcanzar los objetivos a tiempo, dentro del presupuesto y según lo prometido.
Tenga en cuenta que no hay un estilo de liderazgo mejor que otro. Cada uno tiene sus pros y sus contras y requiere un cierto nivel de juicio para desplegar el tipo adecuado de gestión en las circunstancias adecuadas.
El primer paso para adaptar tu estilo de liderazgo a las circunstancias es identificar hacia cuál te inclinas de forma natural. Para ayudarle a hacerlo, he aquí un resumen del estilo de liderazgo orientado a la tarea frente al estilo de liderazgo orientado a las personas.
Un líder orientado a las tareas es alguien cuya máxima prioridad es realizar las tareas para alcanzar las metas u objetivos definidos en el plazo especificado. Se centra en los resultados, el rendimiento y la productividad de las personas, el equipo o el departamento que dirige.
Teoría del liderazgo orientado a las relaciones
Centrarse en las personas tiene sentido desde el punto de vista empresarial. En el panorama cada vez más competitivo de bienes y servicios, las personas de una empresa son el elemento diferenciador. Y las empresas no sólo compiten por el dinero de los clientes. Incluso en un mercado laboral difícil, los empleados cualificados y de alto rendimiento tienen muchas opciones. Una gran cultura de empresa ayuda a las organizaciones a destacar para atraer -y conservar- a los mejores talentos.
Las empresas orientadas a las personas reconocen que los logros merecen ser reconocidos y recompensados. Esto puede adoptar la forma de primas, ventajas como vacaciones adicionales, premios e incluso acciones sencillas como un sincero “gracias” o un pequeño regalo. Los programas de incentivos pueden ser beneficiosos para motivar a los empleados a alcanzar objetivos específicos.
En las organizaciones orientadas a las personas se entiende que los empleados son individuos y, como tales, no responden de la misma manera al reconocimiento y la recompensa. A algunos empleados les encanta ser el centro de atención en una ceremonia de entrega de premios de la empresa, mientras que otros se sienten incómodos con los elogios públicos y serían mucho más felices con una nota privada de agradecimiento. Mientras que a algunos les motiva la recompensa monetaria, a otros les motiva principalmente el aprecio y saber que forman parte del éxito de la empresa.