Liderazgo que marca el ritmo
Los líderes fuertes -como los guías, mentores y maestros- tienen el poder de influir fuertemente en nuestras vidas y cambiarlas. Por tanto, es lógico que las habilidades de liderazgo afecten al éxito de nuestros equipos y de las empresas que dirigimos.
Uno de los estudios sobre liderazgo más reconocidos hasta la fecha fue dirigido por Daniel Goleman. Titulado “Leadership That Gets Results”, muestra los resultados de un estudio de tres años sobre más de 3.000 mandos intermedios y divide los estilos de liderazgo en 6 tipos distintos.
“Haz lo que te digo” es el lema de gestión preferido del líder coercitivo. Como un sargento al frente de sus tropas en el campo de batalla, este líder está armado con un montón de iniciativa y equilibrado con autocontrol.
Recuerda que este estilo de liderazgo puede resultar destructivo para los miembros y proyectos más creativos. Mientras que los seguidores se sienten seguros y guiados, los empleados más capaces pueden perder la motivación y es probable que se resientan de la microgestión.
El líder visionario, o estilo de liderazgo autoritario como lo conoce Goleman, es nuestro maestro más creativo, excéntrico e inconformista. Adoptan un enfoque de “ven conmigo”, ya que conducen a la empresa hacia su visión de cómo podría ser el éxito.
Ventajas e inconvenientes del estilo de liderazgo afiliativo
Si se pudiera describir al líder afiliativo con una palabra, sería armonioso. Estas personas muestran sus rasgos de liderazgo fomentando la armonía y la resolución de conflictos entre equipos. Su objetivo es crear grupos que trabajen bien juntos para alcanzar los objetivos fijados por la organización. Sin embargo, su motivación no se limita al cumplimiento de los estándares de rendimiento, sino que tienen un interés genuino en asegurarse de que los compañeros de trabajo se sientan conectados entre sí. Este estilo de liderazgo es favorable para los empleados. Muchas veces, se recurre a estos líderes para inspirar la creación de equipos y levantar la moral de los empleados.
El liderazgo afiliativo se considera uno de los seis estilos de liderazgo emocional. Este método, junto con el visionario, el coaching, el democrático, el de mando y el de marcapasos, influye directamente en las emociones de los trabajadores. Los rasgos populares de este estilo promueven lazos emocionales entre los trabajadores y sus empleados.
El estilo de liderazgo afiliativo es un tipo de liderazgo que hace hincapié en las relaciones y la colaboración entre los líderes y sus equipos. Se basa en fomentar la confianza y crear un fuerte sentimiento de lealtad y seguridad entre los empleados. Este estilo de liderazgo se caracteriza por el refuerzo positivo y el estímulo, así como por un enfoque de escucha activa. El objetivo del líder afiliativo es fomentar un sentimiento de unidad de equipo, comunicación abierta y respeto mutuo entre el líder y su equipo. Este estilo de liderazgo anima a los miembros del equipo a trabajar juntos y a establecer relaciones entre ellos. También fomenta la comunicación abierta y la sensación de seguridad en el lugar de trabajo.
Características del liderazgo afiliativo
Los líderes fuertes -como los guías, mentores y maestros- tienen el poder de influir fuertemente en nuestras vidas y cambiarlas. Por lo tanto, es lógico que las habilidades de liderazgo afecten al éxito de nuestros equipos y de las empresas que dirigimos.
Uno de los estudios sobre liderazgo más reconocidos hasta la fecha fue dirigido por Daniel Goleman. Titulado “Leadership That Gets Results”, muestra los resultados de un estudio de tres años sobre más de 3.000 mandos intermedios y divide los estilos de liderazgo en 6 tipos distintos.
“Haz lo que te digo” es el lema de gestión preferido del líder coercitivo. Como un sargento al frente de sus tropas en el campo de batalla, este líder está armado con un montón de iniciativa y equilibrado con autocontrol.
Recuerda que este estilo de liderazgo puede resultar destructivo para los miembros y proyectos más creativos. Mientras que los seguidores se sienten seguros y guiados, los empleados más capaces pueden perder la motivación y es probable que se resientan de la microgestión.
El líder visionario, o estilo de liderazgo autoritario como lo conoce Goleman, es nuestro maestro más creativo, excéntrico e inconformista. Adoptan un enfoque de “ven conmigo”, ya que conducen a la empresa hacia su visión de cómo podría ser el éxito.
Ejemplos de liderazgo afiliativo
Hay muchos ejemplos de prácticas de liderazgo afiliativo, como ayudar a los empleados a desarrollar un plan de carrera viable, poner en marcha actividades de creación de equipos y participar en la resolución de conflictos teniendo en cuenta todas las perspectivas.
Por ejemplo, las empresas que requieren mucha creatividad, como la realización de una película infantil de animación, implican trabajar con personas que a veces se dejan llevar por el ego y/o son sensibles por naturaleza. Es su perfil de personalidad. Su temperamento emocional es lo que les hace tan creativos.
Por eso, contar con un líder capaz de tener en cuenta las perspectivas de todas las partes en conflicto, ser objetivo y neutral y llegar a una resolución satisfactoria para todos es un reto excepcional, pero vital.
Sin embargo, cuando un proyecto dura varios años y en él participan docenas de equipos de trabajo, la resolución de conflictos forma parte del trabajo. Un líder con un enfoque afiliativo hacia las personas contribuirá al éxito del proyecto.
Tradicionalmente, el lugar de trabajo es un entorno competitivo en el que los compañeros compiten por una cantidad limitada de recursos, tanto financieros como materiales. Es un lugar que puede fomentar la negatividad y la crítica.