Gestión
La formación en liderazgo corporativo permite a una organización identificar a los líderes actuales o futuros de su organización y ayudarles a desarrollar sus habilidades blandas y duras para convertirse en líderes refinados e ingeniosos que dirijan equipos de alto rendimiento.
Usted atrae a los mejores talentos a su organización, ¿y luego qué? Puede que su trabajo consista en ayudar a mantener a sus empleados retenidos, comprometidos y rindiendo al máximo. Una buena forma de elevar su plantilla es crear un programa dinámico de formación en liderazgo corporativo.
La formación en liderazgo corporativo permite a una organización identificar a los líderes actuales o futuros de su organización y ayudarles a desarrollar sus habilidades blandas (responsabilidad, empatía, inteligencia emocional, comunicación, etc.) y duras (gestión de proyectos, elaboración de presupuestos, modelos analíticos, gestión de recursos, etc.) para convertirse en líderes refinados e ingeniosos que dirijan equipos de alto rendimiento.
La formación en liderazgo es una gran herramienta para contratar y retener a empleados altamente cualificados para su organización. Cuando un programa de liderazgo está arraigado en la cultura de su organización, puede construir un equipo de liderazgo desde la base con empleados a largo plazo.
Asociación para el desarrollo del talento
El liderazgo no es un color de pelo con el que se nace. Es una habilidad y, como cualquier otra habilidad, puede enseñarse y perfeccionarse. A través de la formación en liderazgo, todos los empleados pueden aprender las habilidades que necesitan para convertirse en grandes líderes.
En este artículo, hablaremos de la importancia de los programas de formación en liderazgo e identificaremos a las personas que los necesitan. También veremos por qué fracasa la formación de líderes… y cómo puede asegurarse de que no lo haga.
Un gran liderazgo puede establecer y ayudar a mantener una gran cultura de empresa. Los líderes inspiran a los empleados y los mantienen comprometidos; atraen y retienen a los mejores talentos; fomentan una sólida reputación de la empresa que, a su vez, atrae a más clientes.
Y, sin embargo, según un reciente estudio de Gallup entre empleados estadounidenses, sólo el 15% está totalmente de acuerdo en que sus líderes les hacen sentirse entusiasmados con el futuro. Sólo el 13% afirma que la dirección de su organización se comunica eficazmente. Y dos de cada tres empleados creen que existe una corrupción generalizada en las empresas. No son buenas cifras.
Por supuesto, la formación en liderazgo, como cualquier otro tipo de formación, no es una panacea que resolverá mágicamente todos los problemas de su empresa. Pero si se hace bien y de forma coherente, y se ofrece a las personas adecuadas, puede marcar el comienzo de una transformación duradera.
La mejor formación en liderazgo
Más información sobre el desarrollo del liderazgo en el blog:Conviértete en un líder a seguirEl objetivo de un líder es conseguir que los miembros de su equipo dediquen toda su energía a la creación de una empresa de éxito. En palabras de Tom Roth, Director de Operaciones de Wilson Learning Worldwide: “Lo que hace un líder conduce a su forma: comportamientos y acciones que demuestran la excelencia del liderazgo y que a menudo se rigen por la estructura existente en una organización. La esencia es la imagen o persona que crea el líder. Si no hay integración entre esencia y forma, puede cuestionarse la credibilidad”. Los grandes líderes son expertos en conseguir que la gente les siga para alcanzar objetivos comunes o compartidos.Ver todas las entradas relacionadas con Liderazgo.
Inteligencia emocional
La formación en liderazgo tiende un puente entre el tipo de cultura organizativa que los líderes piensan que están creando y el tipo de cultura que desean crear. Mediante la introducción de programas de formación en liderazgo y gestión, los líderes recibirán información sobre cómo están afectando a los subordinados y qué acciones y medidas pueden tomarse para abordar las áreas que necesitan atención instantánea.
Comprender cómo afectan las acciones a los demás que dependen de ellos, directa e indirectamente, es la diferencia clave que incorporan los líderes eficaces. La formación y el desarrollo del liderazgo aumentan su propia perspectiva de lo influyentes que pueden ser y de los efectos que esa influencia puede causar en la cultura general.
La evaluación de la eficacia del liderazgo ayuda a los líderes a identificar estrategias y técnicas que pueden emplear para fomentar la eficacia duradera, el rendimiento y la productividad de la organización y sus miembros. La formación en gestión proporciona información que los directivos pueden convertir en acciones inmediatas.