5 componentes de la inteligencia emocional
Si ha oído hablar mucho de la inteligencia emocional pero no está seguro de qué se trata, o si sabe lo que es pero no ve cómo se aplica realmente en el lugar de trabajo, ha llegado al lugar adecuado.
En este artículo, definiremos la inteligencia emocional en el contexto del lugar de trabajo, describiremos sus componentes, exploraremos sus correlaciones en el lugar de trabajo y veremos cómo mejorarla tanto para cada empleado (incluido usted) como para la organización en su conjunto.
Antes de seguir leyendo, hemos pensado que le gustaría descargarse gratuitamente nuestros 3 Ejercicios de Inteligencia Emocional. Estos ejercicios basados en la ciencia no sólo mejorarán su capacidad para comprender y trabajar con sus emociones, sino que también le proporcionarán las herramientas necesarias para fomentar la inteligencia emocional de sus clientes, alumnos o empleados.
De un vistazo a estos componentes, ¡es fácil ver cómo se aplica la IE en el lugar de trabajo! Está claro que los trabajadores con mayor grado de autorregulación, motivación intrínseca y habilidades sociales tienen una ventaja sobre los que tienen menos. Más adelante veremos algunas de las razones por las que esto es así.
Inteligencia emocional en las organizaciones
Defina la inteligencia emocional, su valor en el lugar de trabajo y cómo utilizarla. Utilice New Hire Insights y Talent Insights para medir la autoconciencia, la autorregulación, las habilidades sociales, la empatía y la motivación de un empleado.
Las cualidades más buscadas en los candidatos a nuevos puestos de trabajo incluyen desde hace tiempo puntos como la educación, la motivación, la experiencia, la fiabilidad y la confianza. Más recientemente, la inteligencia emocional ha entrado en la lista como uno de los rasgos más deseables en los individuos de la mano de obra actual. La inteligencia emocional, o Inteligencia Emocional, desempeña un papel vital en la capacidad de cualquier empleado para actuar eficazmente como parte de un equipo profesional.
La emoción y la conexión personal han sido durante mucho tiempo un tema tabú en el lugar de trabajo: esta idea anticuada sugiere que la interacción interpersonal más allá de lo extremadamente profesional es improductiva en el mejor de los casos, y perjudicial en el peor. Pero esto no podría estar más lejos de la realidad. Resulta que los empleados emocionalmente inteligentes o los grupos con una alta Inteligencia Emocional son más productivos y tienen más éxito que los que no la tienen. La conciencia activa y la empatía fomentan la unión del equipo y la motivación colectiva: todos trabajan por el éxito del grupo y de la empresa en general. A las empresas de todo el mundo les interesa contratar empleados con este rasgo tan importante.
Por qué es importante la inteligencia emocional
Cuando la inteligencia emocional se hizo popular en la década de 1990 -gracias en gran parte a la llegada del best-seller Inteligencia emocional: Por qué puede importar más que el cociente intelectual – los lugares de trabajo tomaron nota. En los años transcurridos desde entonces, el valor otorgado a la inteligencia emocional, también conocida como cociente emocional o EQ, ha crecido sustancialmente en el lugar de trabajo.
Sin embargo, por muy codiciada que sea la inteligencia emocional, no todo el mundo en el trabajo conoce bien su propia inteligencia emocional o cómo gestionar las emociones. Es una lástima en muchos sentidos, porque los empleados que desarrollan la conciencia y la inteligencia emocional crean grandes oportunidades profesionales para sí mismos.
Los líderes emocionalmente inteligentes obtienen resultados aprovechando las emociones positivas y negativas de los demás, al tiempo que son plenamente conscientes de las suyas propias. Esta comprensión emocional tiene más probabilidades de retener al personal y mejorar las relaciones con los empleados que cualquier otra cosa.
Incluso los empleados más afables y cariñosos tienen días en los que las presiones de su trabajo les superan. Sin embargo, al reconocer cómo sus emociones afectan a los demás, tiene muchas más posibilidades de proteger a sus colegas de daños colaterales.
Definición de inteligencia emocional
Hemos crecido escuchando que los que tienen un alto coeficiente intelectual pueden alcanzar el éxito y llegar a la cima de su carrera. Aunque esto sigue siendo cierto, una gran inteligencia puede llevarte a muchos sitios, pero en el mundo actual lo que hace que una persona destaque entre la multitud es la habilidad fundamental de la inteligencia emocional.
La inteligencia emocional es la capacidad de reconocer las emociones propias y ajenas y de comprender los efectos de las emociones en los demás y en el entorno. Esta comprensión se utiliza para guiar nuestros pensamientos y formas de responder. También incluye la capacidad de gestionar las emociones y utilizar la comprensión de las mismas para facilitar el pensamiento, la toma de decisiones y el mantenimiento de las relaciones en el lugar de trabajo.
Cuando pensamos en las emociones, la gente suele creer que todo lo relacionado con ellas tiene que ver con ser sensible o débil. Y pensar en las emociones en el lugar de trabajo puede parecer inusual porque la creencia popular hasta hace unos años era que no debería haber espacio para las emociones en el lugar de trabajo. Por el contrario, nuestros conocimientos actuales sugieren que las personas tendrán emociones y experiencias emocionales en el lugar de trabajo y que es fundamental desarrollar la inteligencia emocional centrándose en el desarrollo de las competencias básicas. Éstas son: