¿Cuáles son las emociones y los estados de ánimo básicos?
“¿De qué humor estás?” “Pon música para crear ambiente”. “Hoy está de mal humor: creo que deberías esperar para preguntarle por eso”. Tenemos muchas formas de utilizar la palabra “estado de ánimo”, y todas ellas reflejan la atmósfera emocional de una persona o una situación. Con nuestras emociones siempre cambiantes y nuestras ajetreadas vidas, gastamos una tonelada de energía tratando de “conseguir el estado de ánimo adecuado”. Pero, ¿qué son exactamente los estados de ánimo y por qué los tenemos?
Este artículo le ayudará a entender la ciencia que hay detrás de los estados de ánimo y los diferentes tipos de estados de ánimo.Antes de seguir leyendo, si usted es terapeuta, coach o empresario del bienestar, asegúrese de conseguir nuestro eBook gratuito Wellness Business Growth para obtener consejos de expertos y recursos gratuitos que le ayudarán a hacer crecer su negocio exponencialmente.
Como señalé anteriormente, los estados de ánimo pueden caracterizarse por dos dimensiones: lo agradables o desagradables que son y su intensidad. Otra forma de verlo es cómo nos centramos en la recompensa frente a la amenaza (Nettle & Bateson, 2012). A partir de esta comprensión, podemos identificar cuatro ejemplos de estados de ánimo: Puede ser útil para su propia capacidad de responder hábilmente a sus estados de ánimo pensar en lo que cada tipo de estado de ánimo le anima a hacer. Los estados de ánimo son estados temporales -aunque no tan breves como las emociones puras- que moldean nuestra capacidad de responder a nuestro entorno (Siemer, 2005). Por lo tanto, pensemos en lo que nos motiva a hacer el afecto central de cada estado de ánimo (Carver, 2001).Nuestros estados de ánimo, al igual que nuestras emociones, nos sintonizan con nuestro entorno de formas específicas. Un estado de ánimo positivo o agradable nos hace más propensos a prestar atención a las cosas gratificantes de nuestro entorno, mientras que un estado de ánimo negativo o desagradable hace que nos fijemos más fácilmente en las cosas amenazadoras o castigadoras (Carver, 2001). Por ejemplo, mi experiencia en un patio de comidas de un centro comercial varía según mi estado de ánimo. En un estado de ánimo positivo, es posible que recorra todo el espacio, percibiendo los olores y saboreando mentalmente todas mis opciones. En cambio, si mi estado de ánimo es negativo, puede que me fije en lo largas que son las colas y me dirija directamente a la más corta.
Diferencia entre sentimientos y emociones en hindi
A efectos de mi libro, he agrupado las tres categorías de emoción, sentimiento y estado de ánimo en una descripción más general: “sentimientos”. Sentimientos “buenos” y “malos “Tendemos a calificar de “buenos” los sentimientos, emociones y estados de ánimo que nos gustan y de “malos” los que no. Por ejemplo: Si está irritable o enfadada, está de “mal humor”. Si se siente aprensivo o avergonzado está ‘de mal humor’. Curiosamente, no parece que nos refiramos a tener una emoción “buena” o “mala”.Sentimientos y contextoPuede ser útil, tanto para ti como para los que te rodean, que sepas contextualizar tus sentimientos. Por contexto entiendo el acontecimiento que parece estar relacionado con un sentimiento concreto. Por ejemplo, “cuando oigo ladrar a un perro, me asusto porque pienso que me mordían cuando era niño”, en lugar de “me siento mal cuando los perros ladran”. Al recopilar y/o compartir más información, puedes entenderte mejor a ti mismo, tus sentimientos y dar sentido a lo que está ocurriendo. Aquí tienes una estructura útil que empieza por darte cuenta de un sentimiento:Si los sentimientos no aparecen con facilidad, cambia de tema:Puede ser útil tener una lista de referencia de sentimientos: descárgate mi lista de sentimientos aquí
Diferencia entre emociones y estados de ánimo en el comportamiento organizativo
Somos criaturas emocionales. Es difícil para nosotros, como humanos, no ser emocionales. Aunque en general es bueno estar en contacto con nuestras emociones y no reprimirlas, hay situaciones en las que debemos gestionarlas especialmente bien. Los arrebatos emocionales en el trabajo pueden deberse directamente a cuestiones relacionadas con el trabajo o a factores estresantes de nuestra vida personal que se extienden a nuestra vida laboral. Gestionar nuestras emociones (sobre todo las negativas) en el trabajo suele considerarse una medida de nuestra profesionalidad.
¿Le resulta familiar alguna de estas emociones? Es posible que experimentes otras emociones negativas menos comunes que también te harán sentir estresado. Desde cierto punto de vista, nunca es bueno reprimir o suprimir las emociones, positivas o negativas. Sin embargo, nuestras emociones deben gestionarse para permitirnos funcionar en diversas situaciones. ¿Cuáles son algunas de las estrategias que puedes utilizar para hacer frente a las emociones negativas? 10 Estrategias para gestionar las emociones negativas en el trabajo1. Compartimentación (cuando las emociones negativas de casa afectan al trabajo)2. Respiración profunda y técnicas de relajación3. Técnicas de respiración profunda y relajación3. La regla de los 10 segundos4. AclaraEs bueno aclarar antes de reaccionar, por si pudiera tratarse de un simple malentendido o falta de comunicación.5. Explota tu ira haciendo ejercicio6. Nunca respondas o tomes una decisión cuando estés enfadado7. Conozca sus desencadenantes8. Sea respetuoso9. Pide disculpas por cualquier arrebato emocional10. Nunca lleves tus emociones negativas a casa Ref: S13Consulta nuestros otros artículos sobre el estrés:
Diferencia entre estado de ánimo y emoción pdf
Son inteligentes, tienen una fuerza sobrehumana y no tienen que lidiar con el desorden de las emociones humanas. Pero los robots, a pesar de su brillantez, se pierden lo mejor de la vida, incluido el desorden. En lugar de abandonar nuestras emociones, debemos vivir en armonía con ellas.
Ahora sabemos que hay una diferencia entre sentimientos y emociones, y que afectan a nuestro comportamiento de forma diferente. Comprenderlos puede mejorar tus relaciones y tu salud mental y emocional.
La gente suele confundir sentimientos y emociones, y es fácil entender por qué. Los sentimientos no pueden existir sin las emociones, mientras que éstas existen principalmente de forma independiente. Entremos en materia para comprenderlas mejor.
Las emociones son naturales en todos los seres humanos, independientemente de su cultura. El neurocientífico Antonio Damasio teorizó que se originan en el sistema límbico de la amígdala, una de las cortezas cerebrales que determina las reacciones humanas ante los estímulos. Esta actividad cerebral afecta a nuestro comportamiento humano y a nuestras respuestas emocionales, y puede incluso provocar sensaciones físicas (también conocidas como respuesta somática).